LOSMICROMACHISMOS

 

Desde la sección sindical de CCOO Nissan , queremos explicar los micromachismos, pero, qué son?

Hay muchos comentarios hoy en día que han pasado a formar parte de lo cotidiano, que se han normalizado y que se consideran como simples bromas, pero en realidad NO deberían pasar desapercibidos, puesto que pueden considerarse la base del maltrato psicológico o emocional.

Unos claros ejemplos, que sin duda casi toda mujer ha escuchado a lo largo de su vida, serían:

  • Menudo carácter tienes (mujer).

Si una mujer es decidida y segura es que tiene “mucho carácter, en cambio los hombres con temperamento son “personas con mucha personalidad”.

  • Qué pasa, ¿tienes la regla?

Cuando haces una queja o tienes un arrebato de furia, suelen preguntar en tono jocoso si estas en “esos” días del mes. Normalmente éste suele ir ligado a eres una “histérica” o estas loca.

  • Hoy te han dejado de niñera.

No es una niñera, es un padre que cuida de su hija porque es su responsabilidad y no porque su mujer estaba ocupada.

  • Esto es cojonudo. Vaya coñazo.

Cuando es divertido o bueno es “COJONUDO”, y cuando es aburrido es un “COÑAZO”.

  • Eres una nenaza. Corres como una niña.

Hacer algo como una mujer es un insulto, más claro el agua.

  • Que suerte, tu marido te ayuda en casa.

El simple hecho de situar a la figura masculina como mero ayudante, ya de por sí, es machista.

  • La madre y el “PADRAZO”.

Un padre que cambia pañales, da el biberón o duerme al bebé es un “padrazo”. Para la mujer, parece ser algo normal o natural.

  • Eres un “CALZONAZOS” .

En una relación heterosexual, la cultura machista sitúa a la mujer en una posición de sumisión. De no ser así , se le llama calzonazos al hombre como toque de atención.

  • Ni machismo ni feminismo, igualdad.

Esta frase viene de la ignorancia del significado de la palabra feminismo, el cual significa igualdad entre hombres y mujeres. En ningún caso es lo contrario de machismo.

Otro claro ejemplo de micromachismo lo encontramos en los símbolos del baño donde a la mujer se le sigue representando con falda o con vestido, como si fueran la única indumentaria para la mujer, o los cambiadores de bebé que siempre se encuentran en los lavabos de mujeres, dando por hecho que es el deber de la mujer cambiar pañales.

Probablemente sea difícil percatarse de estos micromachismos, pero para poder evitarlos es fundamental detectarlos lo antes posible y así favorecer el desarrollo de las personas con los mismos derechos y oportunidades.

Sección sindical CCOO Nissan Zona Franca 6 de marzo de 2021