DE INTERÉS GENERAL

Ahora que estamos inmersos en un proceso de negociación donde uno de los temas más importantes que tenemos que abordar es el salario que las trabajadoras y trabajadores de Nissan tendremos los próximos años, vemos como algunas noticias nacionales respecto al tema, merecen nuestros comentarios.

Esta semana hemos visto la publicación del dato provisional sobre el IPCA (Indice de precios al consumo avanzado) que situaba la inflación interanual en un 3,6% en el mes de octubre, un 0,9% más que el dato anterior de septiembre y un 1,6% más que la inflación prevista por el ministerio de economía para el año 2007, fijada en un 2%. Otro dato significativo apuntaba que el gasto de la cesta de la compra había subido en el último mes por encima del 3%, hecho que incide directamente en la pérdida del poder adquisitivo de la clase trabajadora.

Datos todos en sí preocupantes para el desarrollo de la economía de nuestro país, pero más aún para el desarrollo de la inmensa mayoría de familias y personas que dependen de una renta que apenas permite llegar a fin de mes cubriendo las necesidades básicas, que somos el conjunto de trabajadores/as españoles.

Es evidente que esta información cuando la cruzamos con los ratios de beneficios que en los últimos años están obteniendo las empresas en nuestro país, la preocupación se convierte en indignación, ya que los resultados macroeconómicos que obtienen los ejercicios contables de los empresarios, crecen y establecen una diferencia abismal entre la evolución de los salarios y los beneficios empresariales, estableciendo una diferencia cada vez mayor entre las rentas de las personas de la clase alta y la clase trabajadora.

Y si observamos las tendencias de las políticas fiscales de los gobiernos de derechas y socialista, vemos como la reducción de los tramos fiscales y la reducción de los tipos máximos del IRPF favorecen claramente los beneficios netos de las grandes rentas, es decir, de los más ricos, dejando de ingresar importantes cifras económicas en las arcas del estado, empeorando gravemente nuestro estado de bienestar. Un ejemplo, los ciudadanos no podemos tener derecho a la gratuidad de los libros de texto para poder ejercer un derecho constitucional, gratuidad de la enseñanza obligatoria y a su vez los ricos año tras año, se ahorran impuestos equivalentes a millones de euros.

Despues de valorar la situación económica actual primero preocupante y posteriormente indignante, lo que seguidamente comentaremos lo definiremos como insultante. Hoy aparece en los diarios que el Banco de España, a través de su presidente, dice que la culpa del alza inflacionista de la economía española, ese 3,6% de IPC, es culpa de las claúsulas de revisión salarial establecida en el 80% de los convenios colectivos. Esa recuperación de poder adquisitivo de los trabajadores/as es la responsable de la revisión al alza de la inflación.

!TOCATE LOS COJONES!

Perdonar el tono, pero en esta ocasión no hemos podido evitarlo. Los trabajadores/as no solo tenemos que favorecer el crecimiento económico con una política de moderación salarial continua, sino que también tenemos que aportar nuestro granito de arena con la perdida de nuestro poder adquisitivo. Solo tenemos que pactar los IPC previstos, ya que sino podemos poner en riesgo el crecimiento de las rentas de las grandes corporaciones económicas, la gran mayoría, nuestras empresas.

Currantes, seguir bajando vuestros sueldos que no podemos seguir ganando montañas de dinero.

¿Y así creeis que la lucha de clases ha terminado? ¿Entendeis que nuestras reivindicaciones sindicales están obsoletas?

Por un trabajo digno, por un sueldo digno, por la defensa de una españa social, arriba la clase trabajadora abajo el capital. Todos estos lemas de la época de la transición, en la España actual, por supuesto en otro contexto, siguen siendo vigentes.

Sección Sindical de CCOO Nissan