Un dia para recordar

 

El pasado sábado 21, tuvo lugar el acto de homenaje a las mujeres que se encerraron en la Iglesia de San Andrés del Palomar en 1976 en apoyo de la huelga de Motor Ibérica. El acto contó con la presencia de un grupo representativo de las mujeres protagonistas que en nombre de todo el colectivo recibieron, emocionadas,  el reconocimiento a su actuación  tanto por parte de  trabajadores/as que participaron en la huelga de 1976 como  de los que actualmente están trabajando en Nissan Motor Ibérica, así como  también de vecinos del distrito de Sant Andreu.

En el acto, organizado en forma de coloquio, participaron: Jordi Rabassa, historiador y vecino del barrio de San Andrés, Blanca Port, consellera del distrito, Mónica Figueres, Mercè Andres  y Carolina Ramos, miembros de la sección sindical de CCOO de Nissan y finalmente Javier Pacheco, secretario general de CCOO Industria de Catalunya.

También participaron en el numeroso acto, el actual párroco de la Iglesia de Sant Andreu Pep Soler e Ignasi Pujades que era el sacerdote que acogió a las mujeres en el  encierro de 1976.

Durante el coloquio ,tuvimos oportunidad de conocer de primera mano y explicado por una representación de las protagonistas, Mercedes, Elena y Maruja, lo que significó la lucha de las mujeres y los trabajadores de Motor Ibérica por la mejora de las condiciones laborales, salariales, y que contribuyó en parte, a la creciente conquista en aquellos tiempos de los derechos, las libertades sindicales y democráticas, y a tener en cuenta ,en plena vigencia de una “dictadura asesina que poco tiempo antes todavía había firmado sentencias de muerte y había asesinado obreros en la luchas de Seat, Fecsa y en el encierro de trabajadores en la catedral de Vitoria” tal y como destacó el historiador Jordi Rabassa.

La intervención de las mujeres que protagonizaron el encierro en 1976, puso de manifiesto la determinación que hicieron gala en aquel momento, manifestaron  la “solidaridad del vecindario del pueblo de Sant Andreu”, solidaridad que agradecieron públicamente, y las dificultades que tuvieron que superar: la incomprensión  y los recelos del “entorno social machista” de la época. Un sacrificio incluso físico,  como muestra alguna de ellas que se encerró convaleciente aun de una reciente intervención quirúrgica.

Algunas situaciones de las que nos hablaron, Mercedes, Elena y Maruja, fueron realmente sorprendentes, ingeniosas y no carentes  algunas de un tono de humor. Por ejemplo el hecho de que cuando la policía las “invitó” a desalojar la Iglesia les dijeron que no podían salir con la chaquetilla de trabajo de Motor Ibérica, “ya que no les pertenecía” (hecho que pone de manifiesto el vínculo existente entre la empresa y las autoridades de la época). Ante esta “petición” el ingenio de estas valientes mujeres suplió tal injusto requerimiento,  simplemente comunicaron a la policía que: ”no llevaban más ropa debajo.”

Igualmente destacable, fue la solidaridad que despertó el encierro entre el entorno cultural y artístico de la época. Ejemplo de ello tenemos  el hecho de que los componentes del grupo musical La Trinca, se presentará en la Iglesia de madrugada para llevarles los periódicos matinales que se hacían eco de que “La Trinca había mostrado su solidaridad con las encerradas en su espectáculo de la noche anterior”

Carolina Ramos, de la actual Sección de CCOO en Nissan, destacó  “el machismo que se encontró aun a principio de la década de los 2000 al incorporarse como trabajadora de taller” y que, “aunque poco a poco  se han ido superando esas situaciones, aún hoy existe discriminación como lo demuestra el hecho de que las mujeres de taller no tienen opciones reales de promocionar a puestos de responsabilidad, como el de supervisor por ejemplo”.

También destacó el papel de CCOO en aquel momento, para conseguir que en Nissan pudieran entrar trabajadoras en las líneas de producción. El sindicato, CCOO,  llevaba tiempo exigiendo a la empresa que incorporara mujeres en las líneas  esta a su vez  argumentaba que “no tenía peticiones de mujeres para entrar a trabajar”. Los componentes de la sección sindical de aquel momento se las ingeniaron  para entregar a la empresa un buen número  de solicitudes de trabajo de mujeres, tras lo cual la dirección  ya no tuvo argumentos para continuar negándose.

Las diversas intervenciones hicieron hincapié en la necesidad de que las trabajadoras y trabajadores, la ciudadanía general, tome conciencia de lo difícil que fue la recuperación de la democracia, la conquista de derechos laborales y sociales en definitiva este emotivo acto nos enseña “la necesidad de mantener una memoria histórica, que nos ayude a tener siempre en cuenta que esos derechos no fueron regalados que hay que continuar luchando día  a día  para mantenerlos y mejorarlos”.

a continuación os dejamos un video que pertenece al programa de tv3 Telenoticies migdia del 21/5 en el que se hace eco del acto